Torre Eiffel (Tour Eiffel)
Si hay algo que representa el turismo en Francia más que cualquier otra cosa, es La Torre Eiffel, es una extraordinaria estructura construida por el ingeniero francés Gustave Eiffel en ocasión de la Exposición Universal de 1889 en París. A pesar de haber sido muy criticada en la época en que se inauguró, hoy día es sin duda alguna el monumento insignia del turismo en Francia.
Arco del Triunfo (Arc de Triomphe)
Dentro del Arco del Triunfo se halla un museo que cuenta la historia del mismo arco y de su proceso de construcción. Esta atracción turística también ofrece desde su techo una hermosa vista de París, especialmente por la noche. Cuando uno piensa en hacer turismo en Francia se ve obligado es visitar el Arco del Triunfo ya que es una de las obras arquitectónicas más hermosas de Francia.
Museo del Louvre (Musée du Louvre)
EL museo del Louvre es doblemente atractivo en relación al turismo en Francia no sólo es en sí mismo una estructura de interés turístico sino que expone piezas de artes de todo el planeta. Para hacer esto el museo se divide en varias secciones temáticas: Arte del Islam y Antigüedades orientales; Antigüedades egipcias; Antigüedades griegas, etruscas y romanas; Esculturas; objetos de arte; pinturas; artes gráficas; Historia del Louvre y Arte de África, Asia, Oceanía y las Américas.
Esta catedral ubicada en la ciudad de París data del año 1163 y está construida en un estilo gótico que le da una hermosísima apariencia en particular a su fachada occidental. Este pilar del turismo en Francia resulta una de las atracciones más visitadas por los turistas.
La belleza de los castillos y lo diferentes que son entre sí deja impactado al turista tras vivir una experiencia única no sólo por la majestuosidad de las construcciones sino por la cantidad de castillos que conoce en un solo día.
Monte Saint-Michel
Es una de las atracciones turísticas más impresionantes del país, se trata de una isla rocosa que alberga una abadía medieval de una majestuosa arquitectura. Lo fenomenal del lugar no es únicamente la belleza de la construcción y lo extraño del sitio donde a sido levantada sino que si usted pasa algunas horas allí podrá ver cómo el trayecto que usted ha recorrido tranquilamente para entrar a la abadía comienza a ser cubierto por la marea creciente hasta tapar completamente la isla y dejar la construcción con el aspecto de estar flotando en medio del océano.
El Palacio de Versalles fue la residencia oficial de varios reyes de Francia y resulta uno de los palacios más hermosos del mundo. La arquitectura tan particular que presenta y el lujo extraordinario con que ha sido construido (y mantenido a través de los siglos) dejará absolutamente impresionado al visitante.
En la colina de Montmartre (París) se encuentra esta basílica construida en homenaje a los caídos en la guerra franco-prusiana. La construcción de este fabuloso edificio tomó desde 1875 hasta 1919 y es hoy uno de los puntos más visitados de la capital francesa. 80 metros de altura y cuatro enormes domos expresan con suma elocuencia la belleza de la arquitectura de estilo romano y bizantino con que fue diseñada. Una característica peculiar de la basílica de Sacré Coeur (Sagrado Corazón, en español) es que en su interior aloja una campana llamada Saboyarde que tiene 3 metros de diámetro y pesa 26 toneladas.